Cuaderno hojas lisas para un nuevo comienzo.

Cuando el miércoles 4 canté con el coro de ex alumnas para despedir al Sr. López (que se jubila), no paré de llorar. Cuando llegué a casa intenté explicar la angustia y esto es lo que logré más o menos pensar: con el Sr. López se fue Mi lugar en el Colegio. Si bien terminé la secundaria en el 97, todos estos años cuando quise pasar a saludar, nunca fui a otro lado que no fuera el subsuelo del Music Room. Siempre que bajaba las escaleras me encontraba con un saludo reconfortante, amable y amigo. Ese era mi lugar de pertenencia, lugar donde aprendí a querer la música, a ser responsable, consecuente y valorada. Ese subsuelo había quedado como un Safe Home de quien yo quería ser y no logré ser del todo. Ahora, con la partida del Sr. López, ese lugar va a seguir estando pero ya no va a representar lo mismo, porque él y Leda le conferían esa identidad que yo buscaba y encontraba. Ojalá quien lo suceda logre despertar esos sentimientos y ese amor al trabajo con la música que él logró en muchas de nosotras. Pero en algún momento hay que crecer...
Me di el gusto de hacerle un cuaderno para su nuevo comienzo, agradeciéndole por habernos, a mí y a todas las ex alumnas que cantamos bajo su batuta, hecho querer la música. Firmamos todas las que cantamos en la despedida pero nos representa a todas. 
Gracias, por la alegría de la Música.